FESTIVAL DE TEATRO Gustavo Geirola dió una charla en la Sala “Vañek” El director de teatro e investigador Gustavo Geirola estuvo en Corrientes, invitado por los realizadores del II Festival de Teatro “De las Siete Puntas”. Ayer por la mañana, en la sala “Vañek” de la Subsecretaría de Cultura, presentó su libro “Arte y oficio del director teatral en América Latina” que, dividido en tomos (tres ya editados y otros tantos en lista de espera), pretende llenar un vacío de informe sobre la actividad de los profesionales en dicha disciplina. Acompañado por el director Héctor Rodríguez Brussa y por los directores y actores locales María Esther Aguirre y Angel Quintela, Geirola habló sobre esta selección hecha en países de América Latina para mostrar las distintas tendencias que cada director aplica en su trabajo.
“Su personalidad exquisita, su experiencia y nivel académico no le hicieron perder su posibilidad en el análisis crítico, como si fuera un iniciado”, señaló sobre el autor, su colega Rodríguez Brussa.
Geirola es profesor titular en el Departamento de Lenguas y Literaturas Modernas de Whittier College, Los Angeles, California. Obtuvo su licenciatura en la Universidad de Buenos Aires y su doctorado en Arizona State University.
Es director e investigador teatral. Ha enseñado en la Universidad de Salta y en la Escuela de Teatro de la Facultad de Artes de la Universidad de Tucumán. Ha sido profesor visitante en The Catholic University of América, en Washington DC y asistente de investigación y de enseñanza en Arizona State University.
Ha publicado “Teatralidad y experiencia política en América Latina” (Gestos: Irvine, California, 2000) y se explaya en esta obra editada en el año 2007 y a punto de concluir en los restantes meses del 2010.
El libro, los tomos
“Arte y oficio del director teatral en América Latina”, es un proyecto continental cuyo objetivo es llenar un vacío en los estudios teatrales; el proyecto buscó entrevistar a directores de la región (incluyendo latinos en los Estados Unidos), para conocer sobre sus metodologías de trabajo, desde la selección del texto hasta la recepción de la crítica, pasando por todas las instancias de producción, especialmente aquellas concernientes al ensayo teatral, la selección del elenco, métodos de actuación, la relación con los productores (oficiales, privados, sistemas de financiamiento, etc.).
Las entrevistas dejan entrever una compleja trama de cuestiones económicas, sociales, artísticas y culturales que circunscriben las prácticas teatrales contemporáneas en América Latina.
“Estoy harto de analizar textos dramáticos, no me interesa. Ahora quiero saber qué pasa en los ensayos, la ética de los directores”, agrega en la charla que supo llevar con gran interés por parte de la platea.
Geirola utilizó un cuestionario común a cada entrevistado, con preguntas “muy inocentes, los directores no sospechaban de mi maldad”, cuenta sonriente.
El “face to face” fue predominante en cada discurso oral para la compaginación de la escritura. Obsesivo con su trabajo, incluyó cuatro o cinco directores por país, para “dejar testimonio de las formas de expresarse”.
“Me interesa el teatro para pensar, no para entretener”, agregó en cuanto a la selección de protagonistas. “Viajo mucho, los encuentros son generalmente en las casas particulares, me lleva un año la elaboración de cada tomo y aunque la Universidad me financia los traslados, yo me encargo de la edición de los 500 ejemplares por tomo”.
El tomo primero del proyecto, que cubre México y Perú, ya ha sido publicado. El segundo en la serie, incluye directores del Cono Sur, Argentina, Chile, Colombia, Paraguay y Uruguay. En el tercero figuran Colombia y Venezuela, el cuarto próximo a salir, Bolivia, Brasil y Ecuador y más adelante se completa con dos tomos de países centroamericanos y caribeños, con directores ya reconocidos de la cultura latina en Estados Unidos.
“La selección de directores no ha pretendido ser exhaustiva sino representativa de las diversas aproximaciones a la dirección teatral, incluyendo tanto a artistas consagrados en cada país como a directores de minorías o de aparición más reciente en el ámbito teatral, sea a los que se sitúan en tendencias más tradicionales como aquellos que trabajan sobre líneas más experimentales”, opinó.
Como muestra de lo que ocurre, para la Argentina se buscó la palabra de Alejandra Boero, Adhemar Bianchi, Héctor Rodríguez Brussa, Agustín Alezzo, Laura Yusem, Ricardo Bartis y Claudio Gallardou.
De Chile en tanto, Rodrigo Pérez, Ramón Griffero, Ana Harcha, Angel Lattus y Alberto Kurapel.
De Paraguay, Julio Saldaña, Tana Schembori y de Uruguay, Rubén Yáñez, Jorge Denevi, Jorge Esmoris, Nelly Goitiño y Mariana Percovich.
El arte de dirigir, las armas a esgrimir
“Algunos directores de teatro se odian; se da más en la generación del ‘70 que en los jóvenes, que saben hacer lo que quieren”, dijo en un momento de la charla Gustavo Geirola. “Por competencia, por el contexto teatral mismo, por diferencias políticas y la exclusividad de los que dirigen teatro y no quieren saber nada con la televisión”, señaló como razones.
“Escribir, dirigir y actuar para teatro no está bien visto para ciertos grupos; se piensan directores y como tales obran”.
Sábado, 24 de julio de 2010
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