CON ESPECIALISTAS Comenzaron a trabajar en la recuperación de casa Martínez  La Subsecretaría de Cultura de la Provincia, a través de su Dirección General Técnica y área de Patrimonio Arquitectónico, dio inicio a tareas de desmalezamiento y relevamiento de la casa Martínez. La casona ubicada en Quintana al 971 es monumento histórico y buscan convertirlo en museo antropológico. Este inmueble denominado “Casa Martínez” -ubicado en la calle Fray José de la Quintana Nº 971- ha sido declarado Monumento Histórico Nacional por Decreto Nº 3430/46. En este decreto se hace hincapié en la trascendencia social de sus moradores a lo largo de la historia.
Entre ellos, figura Martínez de Lujan Sánchez Moreno y Pérez de Centurión, el doctor Francisco Martínez de Hidalgo, el coronel Placido Martínez, el doctor Juan Esteban Martínez, doña Francisca Perichon de Vandervil y Martínez y don Ignacio Martínez, siendo además lugar de agasajos a próceres como Manuel Belgrano, o el científico Amado Bondpland y los comerciantes ingleses Hermanos Robertson o militares de destacada actuación en la defensa de nuestras fronteras como el general José María Paz.
Además de la trascendencia social de sus moradores, esta la de ser “la obra civil más antigua de la ciudad y desde luego de gran calidad, donde se sintetiza un modo o estilo de vida, desde el periodo colonial y es testimonio de una arquitectura tipológica representativa del área litoral guaraní tanto en sus propuesta espacial en cuanto a su resolución tecnológica”, según lo fundamenta la arquicta Angela Sanchez Negrette.
Actualmente habiéndose realizado la transferencia a la provincia con destino a Museo Antropológico (según Ley Nº 4344), resulta necesaria la restauración arquitectónica de la casona, para adecuar sus espacios a la función asignada en la citada normativa.
Por este motivo, trabajan para preservarla y convertirla en un museo, y que “se transforme en una herencia que dejaremos a las futuras generaciones de correntinos, junto con sus espacios estarán las muestras y exhibiciones que hablaran del hombre que ya no esta, pero que forma el sustrato social de esta comunidad en este territorio y con esta singularidad de correntinos”, argumentaron.
Con este propósito, el Subsecretario de Cultura de la Provincia, el arquitecto Gabriel Romero, abocó a un equipo de la Direción General Técnica, a cargo de Daniel Alfonso y del Área de Patrimonio Arquitectónico, a cargo de Maria Soledad Maciel, para avanzar en el relevamiento, desmalezamiento y elaboración de proyectos.
Lo hacen en forma conjunta con la Dirección de Arquitectura de la Provincia y la Secretaria de Medio Ambiente de la Municipalidad (especialmente con el doctor Casatti), además de la colaboración de la Secretaria de Obras Públicas y la de Parques y Paseos, a cargo de Francisco Solis.
Antecedentes
Es posible destacar que, en el año 1982, se solicita la derogación del decreto que lo convierte en monumento nacional mediante otra decreto o ley Nº 10.488/82 fundamentándose la misma en una triste polémica sobre si vivieron o no los Martínez. En 1986 se restituye la categoría de Monumento Histórico Nacional a través de la Resolución Nº 1595/86.
Esta casona con su tipología de galería perimetral y sus muros cuentan los diversos periodos y los procesos tecnológicos utilizados en la albañilería de la historia de las construcciones de nuestra ciudad. En partes la tierra en tapia, en otras en ladrillos de adobe asentados en barro, otras de ladrillos cocidos asentados en barro y hasta la ultima ampliación que data de principios de siglo XX, el salón que da sobre línea municipal con muros revocados en barro, encalados y pintados.
Estado
La casa Martínez ha sido demolida en un 70 % en el año 1989 por una empresa del medio, acto que fue paralizado por el Municipio, pero que dejo en ruinas la antigua casona y sumado a esto el largo proceso judicial durante el cual no se realizaron tareas de mantenimiento, excepto un par de tareas de desmalezamiento. La falta de preservación de los muros más un sinnúmero de circunstancias ha dejado al monumento en condiciones lamentables.
Lo cierto es que sus muros refieren el paso de tiempo en las diversas tecnologías y sistemas constructivos empleados en sus diversas dependencias, en la disposición de sus patios y galerías, en el emplazamiento en el centro histórico y en sus dimensiones y escala urbana. Por lo cual, la trascendencia de su recuperación para convertirlo en museo antropológico.
Lunes, 14 de junio de 2010
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